Leche Dorada, Leche de Oro

¿Han escuchado hablar de la leche dorada?

El poder curativo de esta leche empieza hacerse conocido, debido a la cantidad de especies que en ella se mezclan, dentro de las más importantes es la cúrcuma, que ya se utilizaba desde hace más de 4,000 años en el Medio Oriente.

Para aquellas personas que padecen dolores articulares o en articulaciones es maravillosa, también funciona para la tendinitis y, por su efecto antiinflamatorio, es perfecta para las personas que practican el running ya que lubrica las articulaciones. Otros beneficios son a nivel renal e hígado, depura estos órganos así como el gran poder antioxidante de este ingrediente.

La sustancia principal de la cúrcuma es la curcumina, que también es añadida en la India al curry, de este ingrediente proviene su color amarillo así como los múltiples beneficios atribuidos a este ingrediente.

Lo ideal es consumirlo por la noche, y hay que cocinarla por aproximadamente 8 minutos, hay quienes la consumen en crudo mezclada con pimienta negra para mejorar su absorción.

El vehículo de transporte de la cúrcuma es el aceite, que puede ser de almendras dulces, de coco o incluso de oliva, mientras esté prensado en frío.

Como todo en esta vida, hay que consumirse en equilibrio, todo en exceso es malo, por lo que te recomendamos que hagas la prueba y lo hagas una vez por semana.

Ingredientes:

¼ cucharadita de cúrcuma
1 taza de leche de almendras
2 cucharadas de aceite de almendras crudo o aceite de coco extra virgen
Miel cruda

Preparación:

Hierve la cúrcuma, el aceite y la leche de almendras a fuego lento al menos 8 minutos, revolviendo constantemente hasta que obtengas una pasta espesa.

Una vez que se ha enfriado un poco, añade la miel de abeja cruda, ya que si se calienta produce toxinas.

También puedes hacerla tipo capuccino espumoso, batiéndola en la licuadora cuando ha enfriado un poco.

¡Pruébala, es deliciosa y nutritiva!

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