Consejos para Mantener la Calma Durante las Fiestas Navideñas

Para muchos adultos la época navideña termina causando mucho más estrés del que quisiéramos. Atrás quedó esa emoción vertiginosa que solíamos sentir durante noviembre y diciembre, y en cambio, sentimos estrés y preocupación. Claro, todavía sentimos alegría, pero está asociado con el ajetreo y el bullicio de la temporada. Hay presión social, altos estándares personales, preocupaciones financieras y tensión familiar. Si deseas volver a la alegría total que sentías cuando eras niño, intenta seguir estos consejos para mantener la calma durante las fiestas navideñas. Una vez que puedas controlar tu estrés, ¡comenzarás a cambiar de nuevo a esa vertiginosa felicidad infantil!

Mantente agradecido

Una de las mejores maneras de mantener la calma es estar agradecido. Como adulto, las fiestas vienen con diferentes eventos y actividades para hacer. Esto hace que te concentres en todas las cosas que tienes que hacer, en lugar de lo que realmente terminas haciendo. Haz lo mejor que puedas en esta temporada para mantenerte agradecido y por las oportunidades que tienes: te ayudará a re enfocar tu mente hacia algo más positivo.

La temporada de regalos está en camino, y en lugar de gastar dinero que no deberías, piensa en crear algo. Si descubres que te enojas durante las fiestas, crea algo para calmarla. Es una de las mejores maneras de convertir la ira en energía positiva. Regala una comida hecha a mano, o pinta a tus seres queridos una imagen. Tienes muchas maneras de profundizar en tu creatividad durante la temporada navideña.

Los horarios normales pueden dejarse de lado durante la temporada de vacaciones, y si deseas mantener la calma, entonces tu horario debe permanecer igual. Para evitar el mal humor durante las fiestas, manténte lo más cerca posible de los horarios regulares de comida y sueño. No comas tarta antes de acostarte en Acción de Gracias, y no te quedes despierto mucho más tarde de lo habitual. Si te sientes malhumorado, pregúntate si has ignorado tu rutina típica.

Durante las vacaciones, muchas personas deciden renunciar a sus horarios de entrenamiento, pero en realidad este es uno de los momentos más importantes del año para mantenerse en movimiento. Recomendamos un paseo por el vecindario cuando notes que tus niveles de estrés se disparan. El movimiento no solo libera endorfinas para mejorar tu estado de ánimo, sino que la luz del sol le dará a tu cuerpo la vitamina D que tanto necesitas. Planifica un juego de fútbol familiar o caminatas diarias de invierno. Tu cuerpo te lo agradecerá.

Deja de obsesionarte por hacer todo y hacerlo solo. Si te esfuerzas por la perfección en cada área de tu vida, tu estrés y ansiedad se volverán difíciles de manejar. Reconoce que el mundo no se acabará, y tu familia aún estará feliz si la casa está un poco desordenada o la cena es un poco tarde. Enfoca la energía para disfrutar de las personas en tu vida.

Cuando todo lo demás falla durante esta temporada, date un descanso. Tomarte el tiempo para relajarse solo es una estrategia de afrontamiento maravillosa que no se acostumbra mucho. Pasar tiempo con tus seres queridos es importante, pero también puede aumentar la tensión y el estrés a un nivel que no experimentas en otras épocas del año. Presta atención cuando necesites un descanso de las personas y pasa un tiempo a solas.