¿Por qué es necesario el uso de antibióticos naturales? Parte 2
Continuando con los antibióticos naturales hoy hablaremos de los 3 que estaban pendientes
La equinácea se originó en América del Norte. Los nativos americanos siempre habían estado utilizando sus hojas y raíces para curar las heridas de todo tipo. La equinácea previene las infecciones y mejora la inmunidad de tal manera que estimula el cuerpo para producir linfocitos.
Las Células de linfocitos son las células más pequeñas del tejido conectivo, con un papel defensivo que se manifiesta a través de la producción de anticuerpos y la participación a la respuesta inmune. De esta manera la equinácea puede prevenir una enfermedad o acelerar significativamente la recuperación.
La equinácea fortalece el sistema inmunológico de una manera natural mediante la prevención de infecciones bacterianas y especialmente virales. Es increíblemente eficaz en la prevención de gripe, fiebre, infecciones del oído y condiciones similares a la gripe.
Existe evidencia sobre su eficacia contra las bacterias extremadamente peligrosas, como el Staphylococcus aureus. Calma los sistemas respiratorio, digestivo y sistema urinario, y también limpia las bacterias, alivia las inflamaciones de la piel, purifica la linfa y fortalece la inmunidad. Sólo unas gotas de su tintura pueden aliviar el dolor de garganta en el mismo comienzo de la inflamación. Se puede utilizar también como un té.
El propóleo es la sustancia resinosa producida durante el proceso de la savia que las abejas recogen de diferentes plantas. Las abejas utilizan el propóleo para mantener la higiene de la colmena – para protegerla de los intrusos, incluyendo infecciones.
Desde la antigüedad las personas han utilizado el propóleo como un antibiótico natural que protege contra las bacterias y fortalece el sistema inmunológico. Sus efectos beneficiosos se han conocido desde los tiempos de Hipócrates, que lo utilizó para tratar las úlceras y heridas. A diferencia de los antibióticos convencionales, el propóleo también afecta a los virus. Contiene al menos 19 sustancias activas, todas las vitaminas, y 13 de los 14 minerales que tu cuerpo necesita. Estudios han demostrado que al tomar el propóleo en la temporada de la gripe y el frío puede reducir el riesgo de estas enfermedades en un 53%. El propóleos es eficaz en el tratamiento de la tos, dolor de garganta, sinusitis, y amigdalitis. Una crema a base de propóleo es un excelente remedio para las infecciones fúngicas y bacterianas de la piel.
La gente ha sabido durante mucho tiempo sobre las propiedades de la vitamina C y todavía se utiliza con fines preventivos y como uno de los antibióticos naturales más efectivos.
La vitamina C es un antioxidante natural, que desempeña un papel específico en la estimulación del mecanismo defensivo en el cuerpo. Esta vitamina es el rey de la prevención y las personas que lo utilizan disfrutan de sus grandes beneficios en la temporada de gripe y resfriados.
Esta se puede consumir en comprimidos, pero también la consigues en frutas como naranja, toronja, guayaba, mandarina, piña, kiwi, etc…3 porciones de estas frutas y fortalecerás tu sistema inmunológico
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