5 hábitos que aumentarán tu inteligencia

A lo largo del tiempo hemos conocido a grandes genios, los cuales también hacían cosas algo locas. Einstein por ejemplo. Así que al parecer, la locura y la genialidad están estrechamente ligadas.

Si te atreves a adoptar estos 5 hábitos, un tanto excéntricos o locos, podrías convertirte en un genio.

1. El “Cuarto de la Calma”

¿Sabes quién es Yoshiko Nakamatsu? Ha inventado más de tres mil cosas, incluyendo los disquetes. Él tiene un cuarto cubierto con placas de oro de 24 quilates, pues asegura que el metal es capaz de bloquear las señales de radio y televisión, las cuales son perjudiciales para la imaginación. Y bueno, posiblemente nuestro “Cuarto de la Calma” no esté lleno de oro, pero sí podemos alejarnos de todo, llámese celular, televisor, internet, etc. Darnos un tiempo en el que podamos conectarnos con nosotros mismos, con nuestra mente.

2. No supongas

Echarle sal a tu comida antes de probarla hubiera evitado que trabajaras con Thomas Edison. Así es, pues este genio decía que aquellos que sazonan los alimentos sin haberlos probado son personas que deciden basándose en suposiciones. Suena coherente, ¿no? Así que de ahora en adelante intenta tomar buenas decisiones y dejar de suponer.

3. Relaciones sexuales

Científicos e investigadores de una Universidad en Seúl descubrieron que la actividad sexual fomenta la producción de neuronas (neurogénesis), ya que combate el daño provocado por el estrés. Seguro este hábito sí lo pondrás en marcha de inmediato.

4. Ayunos

Pitágoras solía experimentar periodos de ayuno de hasta 40 días, pues aseguraba que esta práctica aumentaba la creatividad. Y tenía razón. Estudios recientes demuestran que pasar hambre fomenta un proceso que estimula el crecimiento de las células cerebrales y la memoria. Sentir hambre causa que el cerebro genere endorfinas, que te lleva a un estado de euforia. Por supuesto que no te recomendamos ayunar por 40 días, pero los expertos dicen que el simple hecho de reducir las calorías que consumes provocará un efecto similar.

5. Agua fría

Bañarte con agua fría no sólo es bueno para tu piel y tu cabello, sino también para tu cerebro. Theodore Roosevelt y Benjamín Franklin solían nadar en aguas frías. Incluso esta idea era apoyada por Hipócrates. Lo que sucede es que un baño frío activará la circulación en tu cuerpo, y llenará tus órganos de sangre fresca. Así que ya sabes lo que debes hacer la próxima vez que te bañes.