¿Realmente puedo ser despedido por culpa de mis mensajes privados?

Pregunta: ¿Fue error de mi jefe despedirme después de que un extraño le envió fotos de mis mensajes privados? Leamos la historia completa.

Soy empleada de medio tiempo en una tienda de ropa. Salí de mi trabajo hace un par de semanas, me subí al autobús para ir a casa, y como siempre, me puse a ver mi celular.

En cierto punto, mi novio me envió un mensaje preguntando si ya había salido del trabajo. Le respondí diciendo algo como “Si… y no podré estar en casa lo suficientemente rápido. Estoy cansada y el hecho de que la vaca sentada junto a mí está abarcando la mitad de mi asiento y no conoce el desodorante.”

Fui llamada a la oficina de mi jefe al comenzar mi siguiente turno y me dijo que alguien se había quejado de mí. No pude recordar sobre alguna forma en que haya molestado a un cliente… hasta que mi jefe me mostró una serie de fotografías de la pantalla de mi celular, tomadas por la persona que estaba sentada tras de mí en el autobús, y quien me reconoció por la tienda.

Fui despedida, pero creo que es ridículo. En ese momento no estaba usando nada que me identificara como miembro de la compañía. Lo que yo haga en mi tiempo libre es mi problema.

Ahora estoy luchando por encontrar otro trabajo, porque el gerente de la tienda se ha rehusado a que cualquier otro gerente de departamento me dé una carta de recomendación.

¿Quién estuvo mal aquí?

Respuesta: Todos, en diferentes niveles.

Sobre todo, tu empleador. No es asunto de nadie lo que escribes en tus mensajes privados en tu tiempo personal. Tienes una expectativa razonable de privacidad al enviar un mensaje privado, y ellos están mal al despedirte por esa razón.

La mujer atrás de ti se pasó de la raya al asomarse sobre tu hombro para leer lo que escribías, tomando fotografías de tu celular, y enviándolas a tu jefe. No debería estar viendo el celular de un extraño en primer lugar, y ella debió haber tenido una razón para intentar ver lo que estabas escribiendo; no fue algo forzado que estaba en su línea de visión y no pudo evitar leer. (E incluso si no podía evitarlo, la cosa educada que hay que hacer en ese caso es pretender que no lo leyó – no tiene que comentar, y muchos menos fotografiar, los mensajes privados de alguien más sólo porque pudo llegar a verlos en el transporte público.)

Pero tu empleador es peor. La mujer que le envió las fotos fue entrometida, pero ellos fueron los que de hecho te despidieron. Ellos están completamente equivocados.

Pero también debemos mencionar, tú no andas por ahí oliendo a rosas – y no por tus actos en esta historia, sino por tu comentario: Tienes una actitud bastante grosera sobre las personas con sobrepeso. Tu comentario sobre el gerente de la tienda al final de tu carta es mal educado. Eso no cambia el hecho de que no merecías ser despedida por lo sucedido, pero perderás mucha simpatía en la vida por hablar de otras personas de esa manera, y con mucha razón. Tu novio puede estar de acuerdo contigo cuando llamas a las personas “vacas gordas” (aunque no debería), pero hacer un comentario sarcástico e insultante a un extraño (yo) sobre el peso de tu jefe me dice que no tienes tacto o no sabes ser amable (o posiblemente que eres lo suficientemente joven y no has aprendido todavía). Así que: sea más agradable.

Pero si, tu compañía se equivocó aquí, y ese mensaje de texto debió haber sido tratado como privado.

Este caso fue publicado en http://time.com/