8 Alimentos que huelen delicioso pero saben horrible

Estas cosas no deberían ser permitidas en la vida. Te enloqueces con un sabor exquisito que hace saltar a tu estómago, y cuando pruebas ese algo, terminas escupiéndolo en el bote de basura, servilleta, o lo que encuentres primero. ¡No se vale!

Hígado

¿Qué hay de comer? ¡Huele tan bien! “Hígado encebollado”. Sabes qué mamá, olvidé que tenía planes para comer con una amiga, adiós.

Jarabe para la tos

Es la razón por la que los niños crecen odiando a sus padres. ¿Cómo pueden confiar en aquellos que los cuidan si les dan estos horribles jarabes? “Sabor cereza”, los niños pensaban. No sabían lo equivocados que estaban.

Extracto de vainilla

¡Oh vainilla! Me encanta el helado de vainilla. Wow, esta botellita huele a cielo, no me puedo resistir, probaré un poco, veamos… ¡Oh Dios! ¿Por qué lo hice?

Canela cruda

Un ícono de la pastelería y repostería, es amada por su sabor picoso y su aroma característico. Su fragancia es tan fantástica que hasta se usa en aromaterapia. Pero no se te ocurra comerla cruda. En grandes cantidades, la canela cruda llega a ser mortal. Piénsalo dos veces.

Bálsamo para labios

No es técnicamente un alimento, lo sé. Pero algunas chicas en algún momento han comido su bálsamo para labios pensando que su lindo color y aroma a fresa o sandía sabrá igual de bien. Lo siento, pero algunos apestan.

Vino barato

Ése barato que compras en el supermercado, huele a uvas y a madera, pero sabe a rayos. Invierte en un buen vino.

Play-Doh

Otro que no es alimento. Pero los cupcakes y pasteles hechos de play-doh lucen tan divinos y coloridos, y huelen tan bien. Pero un lengüetazo basta para darte cuenta que es excesivamente salada y grasosa.

Galletas para perros

Si huelen a chocolate y lucen como galletas de chocolate… deben saber a chocolate. Muchos de nosotros no nos hemos resistido a probar, sólo para llevarnos una gran decepción. Díganme que no he sido sólo yo.