La Bella Durmiente no tiene una muy buena reputación, porque en serio, ¿quién despierta así de impecable? Incluso en los pocos y distantes días en que vamos a la cama temprano, cuando nos vemos en el espejo a la mañana siguiente no nos gusta lo que vemos.
La verdad es que la Bella Durmiente no es del todo un mito. Las mujeres frescas y bien descansadas que conoces están usando trucos y herramientas para lograrlo. Aquí te presentamos algunos de ellos para que hagas exactamente lo mismo que ellas.
- Empieza por lavar tu cara y tener una rutina de cuidado de la piel. Por la noche tu cuerpo está en fase de recuperación, luchando por rejuvenecer tu piel después de un día muy ajetreado. Antes de dormir, tienes grasa, bacterias y maquillaje en el rostro. Necesitas una rutina para limpiarlo, exfoliarlo, tonificarlo y aplicar un antiarrugas e hidratante.
- Usa ingredientes clave. El retinol, ácido glicólico, péptidos, algas marinas rojas y Dermaxyl fomentan la actividad del colágeno. Y algunos ingredientes calmantes como el té blanco, azuleno y manzanilla proporcionan un alivio antiinflamatorio.
- Acomoda tu cuerpo al dormir. La mejor manera para dormir es boca arriba, así tu cara no tocará la almohada y no te dejará marcas. Usa una almohada que eleve tu cabeza, esto ayudará a evitar las bolsas debajo de los ojos.
- No aplastes tu cara en la almohada. Aplastar tu cara en una almohada por 2.500 horas al año es como si marcaras las arrugas con una plancha. Si prefieres dormir de lado, intenta que la mitad de tu rostro no toque la almohada.
- Fundas de seda. Además de brindarte suavidad extra, también evitará la formación de arrugas y el quiebre del cabello.
- Adapta tu rutina según la temporada. Durante los meses más calientes, cambia a una crema hidratante ligera y usa un gel para cerrar los poros. Durante el invierno, hidratar tu piel es la clave, puedes añadir gotas de aceite a tu crema de noche.
- Crea el ambiente perfecto antes de dormir. Haz de tu dormitorio un oasis de relajación. No celular, no televisión, sólo velas o media luz y una música de fondo relajante.
- ¡Duerme mucho! La falta de sueño causa que tu piel luzca pálida y cansada. Recuerda que si no duermes bien por las noches también hará que te estreses, lo que agrava las condiciones antes mencionadas, incluyendo acné y muchos más.