¿Deberías tener en Facebook a la familia de tu ex?

De vuelta en los viejos tiempos, cuando todo lo que teníamos era localizadores – deja eso, iremos aún más lejos. De vuelta en los viejos tiempos, cuando todos teníamos máquinas contestadoras y un buzón de correo, terminar una relación era mucho más fácil. Todo lo que tenías que hacer era dejar de enviarse correspondencia el uno al otro. Tal vez podían toparse en una tienda por coincidencia, pero aparte de eso, la persona simplemente ya estaba fuera de tu vida.

Hoy en día, tenemos este flujo digital de interconexión que vuelve el rompimiento amoroso (o en mi caso, el divorcio) una verdadera molestia. Perder contacto es casi imposible en la era milenaria. Y cuando tienes un hijo con alguien, la relación, aunque diferente, continúa para siempre.

Ahora hay llamadas telefónicas, mensajes de texto, correos electrónicos y medios sociales como Facebook, Twitter, Instagram, Pinterest, blogs, etc. Así que puedes imaginar el fiasco que puede suceder cuando quitas tu nombre de casada en Facebook, o cambiar el estado de la relación de “ooh estamos enamorados y casados” a “es complicado”.  Intenté hacer la cosa más sencilla y simplemente quité mi estado civil de mi perfil, pero cada vez que ves el “preguntar” al lado del estado civil, todos sabemos que significa que se terminó.

Quitar mi nombre de casada de mi perfil fue una decisión que indujo una angustia considerable. ¿Todos me enviarán mensajes preguntando qué pasó? ¿La gente me publicará sus condolencias? ¿La familia de mi ex se dará cuenta (por supuesto que se dará cuenta) y cuando lo haga, querrán seguir siendo mis amigos en Facebook? Y lo más importante, ¿aún les caeré bien ahora que soy sólo una distante parte de su familia, no relacionada por matrimonio pero relacionada por mi hijo? El día que quité el Hernández de mi perfil, se sintió monumental para mí. Para otras personas, fue sólo una noticia más, pero para mí, me abrió la puerta al mundo. Facebook, nos estamos divorciando.

Pero la elección más grande después de cambiar el nombre de perfil, además de borrar a tu ex (no lo hice) es: ¿Dejas a sus familiares como tus amigos?

Para mucha gente, eliminar a la familia de un ex en las redes sociales puede ser algo obvio. Un amigo me preguntó un día si estaría bien deshacerse de algunos familiares de su ex en Facebook, y yo dije seguro, siempre y cuando no tengas una relación cercana con estas personas. Además, algunos miembros de la familia no serán tus mejores amigos una vez que anuncies que estás pidiendo la palabra con “D”, así que imagina un montón de personas frunciendo el ceño a tus estados, tweets y fotos. Puede ser suficiente para que quieras eliminarlos. Pero para mí, la elección no es tan en blanco y negro. Toda la familia de mi ex, que son mis amigos en Facebook, son personas adorables. Cuando hice oficial el divorcio en las redes sociales, me preocupaba que me borraran y me odiaran.

Yo elegí dejarlos en mis cuentas debido a dos factores. Para empezar, mi ex es muy tranquilo y no está muy metido en los medios sociales, así que no publica demasiado. Yo soy la que, como muchas madres, comparte fotos, momentos y videos de mi hija para que todos la vean. Tenemos una pequeña familia, y cortar ese lazo en este momento de la vida de mi hija sería horrible para todos. No es lo mismo que verla personalmente, pero al menos les da una idea de su vida y la posibilidad de conectarse o dialogar con ella. También sucede que estas personas en verdad me agradan mucho, lo que sé que no es común en muchos divorcios. Mis ex primos son parte de mis personas favoritas. No estoy segura si los veré de nuevo, y realmente me enoja la idea. ¿Cómo es que sigues teniendo una relación consistente con la familia de tu ex después del divorcio, o cualquier relación? ¿Cuál es el protocolo? ¿Les pregunto si serían mis amigos? ¿Dejo que la relación simplemente se dé? ¿Qué preferiría mi ex? ¿Preferiría que ya no los viera?

Cuando se trata de todo esto, aún no he descubierto que es lo más apropiado. El divorcio es como un camino de obstáculos: mientras caminas, algunas partes son muy fáciles, pero en otras te encuentras luchando para continuar. Eventualmente, llegas a la meta bastante cansada, pero también más fuerte.

Mi estrategia actual es continuar actualizada en las redes sociales con los miembros de la familia que conozco muy bien, escribiéndoles comentarios o dando Me Gusta en sus publicaciones, junto con algún mensaje ocasional. Hago esto para que sepan que me importan, a pesar de perder mi Hernández, y para que les quede claro que es importante para mí que formen parte de la vida de mi hija.