5 Formas de Saber si Alguien te Engaña

¿Alguna vez te has preguntando si tu pareja no está siendo del todo sincera? Por desgracia, hay una buena probabilidad de que tengas razón. Mentir ya es perfectamente normal para muchos.

En un estudio de estudiantes de licenciatura, el 60% de los participantes mintió al menos una vez durante una conversación informal de 10 minutos con un extraño. Pero supongamos que se extienda a asuntos importantes, como la fidelidad en pareja.

La ciencia no puede decir si tu pareja está durmiendo con alguien más, pero la investigación reciente ha demostrado que podemos detectar cuando alguien está ocultando algo.

He aquí cinco maneras de saber si tu pareja puede estar ocultando algo importante de ti.

1. Pregúntale a un amigo.

Otras personas – incluso extraños – tienen una extraña habilidad para detectar cuando algo no está bien en la relación de alguien más.

Aunque se necesitan más investigaciones para corroborar este resultado preliminar, el trabajo sugiere que un extraño que observa una pareja haciendo algo que requiere trabajo conjunto, como la cocina o la planificación de un evento, puede ser capaz de detectar la infidelidad o la infelicidad.

2. Reflexionar sobre ello mientras hace otra cosa.

Generalmente, las personas somos malos jueces de carácter – conscientemente. Sin embargo, cuando se nos da tiempo para procesar las acciones de otra persona inconscientemente, tenemos más probabilidades de descubrir el engaño.

3. Escuche su voz.

Recientemente, investigadores canadienses reunieron a un grupo de voluntarios para escuchar un par de voces y evaluar lo atractivo que sonaban en altavoz. Luego, los investigadores les pidieron que juzgaran qué tan probable es que cada persona hubiera engañado en una relación romántica. Mientras que las mujeres voluntarias eran más propensas a decir que los hombres con voces de tono inferiores habían sido infieles, los hombres supusieron que las mujeres con voces de tono alto habían engañado.

Los hombres con más testosterona tienden a tener voces más profundas, y las mujeres con más estrógeno tienden a tener voz más aguda. Y como resultado, los niveles más altos de testosterona en los hombres se han relacionado con mayores tasas de engaño.

Los investigadores todavía tienen que vincular sus resultados con el comportamiento real observado, pero dicen que los resultados del estudio tienen sentido evolutivo. Hipotéticamente hablando, una preferencia por las voces más altas en las mujeres y las voces bajas en los hombres podría “permitirnos elegir a un compañero que pueda quedarse y tener hijos, y no hacerlo con otras personas”.

4. Preste atención al uso de los medios sociales.

¿Tu pareja pasa más tiempo twitteando que hablando contigo? Las investigaciones recientes sugieren que las personas que son altamente activas en Facebook y Twitter son más propensas a tener conflictos relacionados con los medios de comunicación social, y, posteriormente, más propensas a experimentar “la infidelidad, separación y divorcio.”

En su estudio de la Universidad de Missouri, el investigador Russell Clayton observó los hábitos de los medios sociales de cerca de 600 usuarios de Twitter. La persona promedio usa Twitter cerca de una hora al día, cinco días a la semana. Los que más twittean, responden o checan su feed de Twitter, son más propensos a entrar en discusiones con su pareja.

5. Mantente atento a cambios repentinos en su comportamiento.

Si has estado con tu pareja por un buen tiempo, lo más probable es sepas cómo actúa normalmente – qué tipo de alimentos come, cómo reacciona a desafíos o sorpresas, lo bien que escucha, etc.

Los cambios repentinos en el lenguaje corporal o las expresiones faciales de los patrones del habla, pueden ser señales de alerta de un comportamiento hipócrita, según una investigación de Lillian Glass, analista de comportamiento que una vez trabajó en la Oficina Federal de Investigación (FBI) para detectar signos de engaño.

“Tu cuerpo experimenta este tipo de cambios cuando estás nervioso y te sientes tenso – cuando mientes”, escribe en su libro, “El lenguaje corporal de los mentirosos.”

Un signo revelador de la mentira, dice, es una incapacidad repentina para hablar. Esto sucede porque nuestro sistema nervioso autónomo a menudo responde al estrés. Otro es un cambio en la respiración. Esta acción reflexiva puede ocurrir como resultado de los cambios rápidos en la frecuencia cardíaca y el flujo de sangre que nos hacen sentir sin aliento.